En una declaración hecha pública este domingo, más de 250 legisladores iraníes recordaron que la experiencia adquirida en las pasadas rondas de las conversaciones en Viena muestra que la falta de voluntad de EEUU y otras partes negociadoras para brindar las garantías necesarias no solo no ha logrado satisfacer los intereses nacionales de Irán, sino que los ha dañado y ha provocado el fracaso del acuerdo.
Asimismo, enfatizaron que la ausencia de cualquier amenaza contra Irán después de que se alcance un nuevo acuerdo es una de las principales condiciones para la conclusión exitosa de las negociaciones en la capital austriaca, razón por la cual es necesario obtener las garantías necesarias de que, en caso del regreso de EEUU al pacto firmado en 2015, el mecanismo de retroceso no se activaría bajo diversos pretextos.
De igual modo, los legisladores señalaron la imposición de nuevos embargos por parte del país norteamericano a individuos e instituciones iraníes en el curso de las negociaciones de Viena, por lo tanto, es imprescindible que la imposición de nuevas sanciones contra la República Islámica sea prohibida bajo el nuevo acuerdo.
También, insistieron que el acuerdo debe garantizar que las sanciones levantadas no se volverán a imponer.
Los diputados persas enfatizaron que la República Islámica debe tener derecho a exportar su petróleo a cualquier país que desea y en cualquier monto acordado entre las partes, y que debe poder recibir los importes del petróleo a través del sistema bancario internacional.
Finalmente, los legisladores subrayaron que Irán tiene derecho a transferir todos los recursos e intereses financieros, incluidos los ingresos de las ventas de petróleo.
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